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Segunda jornada práctica MillenniumDIPr con profesionales
El pasado 24 de abril tuvo lugar la segunda de las Jornadas prácticas MillenniumDIPr con profesionales. Nos visitaban D. Fermín Moreno, notario de Zaragoza, D. Álvaro Gimeno, Letrado del gabinete técnico del Tribunal Supremo y D. Eduardo Isla Vallés, abogado fundador del despacho Isla abogados. Los ponentes se centraron en explicar las funciones principales de sus profesiones y el acceso a las mismas.
Abrió la sesión D. Fermín Moreno. Aunque inicialmente la profesión del notario pueda parecer muy simple, porque muchos dicen que “se limita a dar fe”, nos explicó que su profesión abarca mucho más. Además, desmontó muchos falsos mitos sobre la Oposición pues sin que se deba desconocer su exigencia es asequible si se estudia con rigor y sistemática. Una idea importante es que el notario asesora a la parte débil que no tiene asesor. Las funciones se visualizan muchas veces en el préstamo y en la compraventa, pero la profesión se basa un trato directo con el cliente, a diferencia de lo que la mayoría creíamos, porque socialmente la figura del notario parece muy distante de la sociedad, y especialmente importante en documentos como el testamento, sin perjuicio de la actuación en el ámbito mercantil o en otros muchos, como el de la llamada Jurisdicción Voluntaria, Declaraciones de Herederos a falta de Testamento o, mas recientemente, expedientes matrimoniales.
La oposición es una carrera de fondo y así debe plantearse pero no hay que tomar en cuenta datos que pueden ser equívocos como la media que se publica de los años que cueste aprobarla pues se nutre de datos no homogéneos, pues en otra época la periodicidad de las convocatorias lo era con un intervalo que ahora no se da. Alentó a la preparación y remitió a un artículo (¨Jubilaciones y Oposiciones”, el Notario SXXI, fácilmente accesible[i]) que muestra que la media de edad de la Corporación es muy alta y se avista una buena época de convocatorias. Es fundamental saber que la Academia del Notariado facilita el temario a los opositores, los prepara gratuitamente y la oposición es compatible con la de Registrador de la Propiedad.
Continuó D. Álvaro Gimeno. Las funciones del Letrado de la Administración de Justicia son muy amplias y abarcan ámbitos variados, como la entrada y registro, los embargos, las comparecencias de las partes antes de la celebración del juicio, la dirección del personal de la oficina judicial y la citación de las partes a juicio. Las oposiciones de juez y fiscal tienen una media de cinco años de preparación y un corte elevado en el examen tipo test, también comparten temario. En las oposiciones a Letrado, aunque se ofertan menos plazas, también se presentan menos opositores. Ambas oposiciones son regulares en el tiempo. Como la legislación cambia mucho, no basta con aprobar la oposición, sino que se ha de estar actualizado.
Terminó D. Eduardo Isla. Explicó que su profesión permite ganar dinero desde el principio, pero no ofrece la seguridad de la oposición. La profesión exige vocación y pasión, no ha de ser una profesión residual, porque supone mucho trabajo. Los mejores clientes son los de defensa libre, porque son clientes elegidos por el abogado, teniendo en cuenta que los clientes son los jueces de los abogados. Esto es, porque quienes abonan los honorarios a los abogados son los clientes. Un factor a tener en cuenta es que el trabajo del abogado es el mismo gane o pierda el juicio. Además, se requiere una gran solvencia técnica para ejercer la profesión con dignidad, seriedad y responsabilidad.
En conclusión, la conferencia ha servido para que el alumnado conozca en detalle los entresijos de cada una de las tres profesiones y tenga una idea más clara de a qué le gustaría dedicarse en un futuro. Teniendo en cuenta que el alumnado de cuarto del Grado en Derecho está en un momento decisivo donde ha de elegir a qué profesión dedicarse, esta Jornada le ha dotado de herramientas para estar en una mejor posición para abordar esa decisión.
